miércoles, 25 de abril de 2012

NOVEDADES.

Hoy he comprobado como ser feliz con un consumo coherente. Desde hace tiempo con mi compi arreglabamos el jardín pero el transporte de las yerbas era una complicación decenas de viajes con un cubito lleno de basuras vegetales que hacían el trabajo un coñazo. Y mira tu por donde con una simple carretilla todo se ha solucionado. Este simple hecho hace que el trabajo sea más fácil y se tenga más ganas de trabajar y el jardín ofrezca un aspecto mas cuidado y no parezca algo silvestre, aunque un poco de asilvestramiento me gusta.
Me gusta ver las amapolas y algunos jaramagos que colorean las artificiales bulbosas impropias de estas latitudes , las propias como los nazarenos o los lirios están mejor.
Cuando he abierto el blog también me he encontrado una sorpresa y es una interfaz nueva de publicación, y esta sorpresa simple me ha resultado grata, ya veis con que poco se puede ser feliz. 
Las fresas ya están rojas, son unas fresitas pequeñas y sabrosas, quizás demasiado ácidas, los frutales que creía muertos están llenos de hojas y de vida y excepto el viento de poniente que no deja de soplar parece que el verano se acerca y ya van sobrando los abrigos.

Llevo unos dias soñando mucho o llevo muchos días soñando poco. Hacía mucho tiempo que no soñaba o al menos no recordaba los sueños pero estos últimos días se repiten los sueños y además son siempre sobre algo que se me pierde, no encuentro el coche en unos extraños garajes donde hay multitud de barcos, salto por muros de una habitación a otra mientras las grúas mueven los barcos de un lado al otro pero no encuentro el coche, el empleado del aparcamiento sentado en su garita me dice que lo busque y de pronto me despierto y me doy cuenta que todo es un sueño absurdo y estoy en mi cama y mi coche en el patio, uffff.  Me levanto echo una larga meada y a dormir tranquilo.

Cualquier sicólogo diría que las perdidas de cosas se refieren a las perdidas de la vida real y eso me conforta pues mientras se resuelvan en el subconsciente el consciente irá mejorando. 
Las piernas no las entiendo, a veces noto una mejoría grande que me permite andar durante una hora o más y de pronto, como el domingo sin motivo aparente me canso en cinco minutos, debe ser algo relacionado con el coco porque en el gimnasio con los tiempos y los esfuerzos controlados todo es más estable. Como si la cabeza ya supiese a lo que se enfrenta y toda la musculatura, aunque duela, se acomoda al esfuerzo hasta completar la tarea.

Los sueños son muy raros, se hacen tan vividos como la misma vida, a veces se hacen tan reales que te levantas sudando o cansado y sólo cuando hay una referencia tan absurda que no se puede discernir te despiertas, a veces también queda un resto de voluntad como si quisieses seguir soñando para resolver lo que es incomprensible pero no, el consciente no te deja volver y racionaliza todo convirtiéndolo en cotidiano.

La idea de la muerte se me viene a la cabeza sin querer, debe ser la edad , como si el organismo necesitara irse adecuando a la situación, no es ni desagradable ni una mala sensación, lo percibo como un algo irremediable a lo que debo irme acostumbrando, tampoco trato de evadir los pensamientos cuando se dan con naturalidad, trato de analizar la situación y la lógica me consuela , me acuerdo de como se fueron mi padre mi madre y mi tía, sin dolor ni tragedias con su tiempo cumplido, y ese pensamiento me dice que debo hacer justo lo que me dé la gana. Aprovechar cada momento al momento, despreocuparme de un sentimiento que me acosa muy raro. 

Ese sentimiento raro es como un algo que se me ha olvidado, siempre hay algo que se me ha olvidado y que tengo que hacer, ya he plantado árboles, he escrito libros y he tenido hijos así que no sé que me queda....pero cuando lo racionalizo salen cosas de lo más trivial, como pagar el alquiler, hacer la declaración de hacienda o comprar champú en el mercadona sin embargo la sensación es algo acuciante, como si tuviese que resolverlo inmediatamente y la misma vida me fuese en ello. 

En estas andamos mientras no consigo crear en ninguno de los sentidos, mis pinturas no tienen sentido, mis canciones se limitan a sucesivas quejas de mis problemas y mis escritos , antes sentidos y preciosistas se limitan a palabras y palabras y palabras mecánicas frente al teclado.

Me avergüenzo y siento pudor cuando intento expresar mis sentimientos acerca de mi compi o de mis amigos, he pensado muchas veces escribir cartas a alguien porque ese estilo es muy coherente, escribir para alguien, pero siento como una especie de pudor en usar a ese alguien que si no tiene figura no tiene sentido.

Incluso cuando me acosan las ganas de expresarme de forma natural y soltar mis odios y mis temores me da miedo. Escondo mis poemas cuando pienso que son tan buenos como para hacer sentir lo que quiero expresar y casi siempre es una justificación de mi rabia.

En definitiva creo que todavía tengo mucho que aprender....  Parece que comenzar una nueva etapa es como empezar una nueva vida  y los niños no tienen mucha seguridad, yo tampoco, pero ya soy adulto.  Y eso es todo me voy a dormir hasta mañana.


1 comentario:

Durrell dijo...

Pues aquí te has expresado estupendamente. Lo mejor es no preocuparse por el porqué e ir soltando amarras. En el momento más inesperado te llegarán las respuestas que buscas.

¿Unas fotos del jardín? Ahora que es primavera debe tener unos colores preciosos. Verde que te quiero verde, como decía el cantar.

Un abrazo